Hornos

Un horno eléctrico funciona mediante corriente eléctrica. Ésta se convierte en energía por resistencias térmica, aplicando el efecto Joule, es de decir la producción de calor a través del choque de electrones. Siendo este un proceso automatizado que permite controlar la temperatura en todo momento, una de sus principales ventajas. Con un horno eléctrico podrás conseguir una cocción más perfecta. Existen diferentes tipos de hornos eléctricos, algunos funcionan a través de la radiación infrarroja, con ventilación para hacer circular el aire y así mantener la perfección de la cocción, generando un ahorro de energía. También hay hornos con sistema de autolimpieza.

Existen varias diferencias, por ejemplo, una de ellas es el tiempo que tarda en calentarse. En el horno a gas genera calor inmediato al prenderlo, en cambio, el eléctrico demora unos minutos. Para enfriarse sucede a la inversa: los hornos eléctricos tardan mucho más en enfriarse que los hornos de gas. También es bueno tener en cuenta el calor ambiente que generan, un horno eléctrico transmite menos temperatura que el horno a gas. Otro punto a considerar es la limpieza, la superficie plana del horno eléctrico lo hace más fácil para la limpieza, al contrario del horno a gas cuya limpieza en profundidad demanda remover caños y hornallas.

Para un ámbito comercial, funciona mejor un horno a gas, dado que resulta más económico en eficiencia energética, pero para el hogar puedes cocinar perfectamente con ambos. Es bueno considerar que, si bien el horno eléctrico genera un calor más uniforme, también existen hornos a gas de mayor tecnología que cumplen con la misma característica. Además de que el calor de las llamas en el horno a gas genera humedad que permite que las preparaciones no se sequen tanto.